José-Vidal Rodriguez

El 8 de enero del 2003 fallecía a los 77 años de edad Ronald Alfred Goodwin, alias Ron Goodwin, uno de los mejores músicos que ha dado la industria de cine británica. Brillante director de orquesta y arreglista, Goodwin cultivó diversos estilos de composición durante su carrera, publicando a su vez numerosos álbumes algunos de los cuáles fueron auténticos éxitos en su país. Entre sus ediciones de música de cine, destacaría dos compactos imprescindibles en cualquier discografía: “The Miss Marple Films”, auténtica filigrana musical interpretada con brillantez por la Odense Symphony Orchestra, y el “Drake 400”, que incluía una magnífica pieza de concierto compuesta en honor al navegante inglés Sir Francis Drake.

A ambos se viene a unir otro interesantísimo disco, este “Film Music of Ron Goodwin”, editado con el esmero habitual del sello “Chandos” (que ya publicara aquel “Drake 400”). Como merecido homenaje póstumo al británico, la Orquesta Filarmónica de la BBC dirigida por Rumon Gamba, realiza aquí un extenso repaso por algunas de sus más míticas sintonías, desde su primera obra compuesta para un filme (“Whirpool”), hasta algunos de sus últimos encargos, escritos antes de su retirada del celuloide en 1987.

El recopilatorio tiene la principal virtud de presentarnos a un Goodwin de dos caras bien diferenciadas: por un lado, el compositor por excelencia del cine de guerra de los 60, creador de varios de los mejores himnos bélicos de la historia del cine y con los que alcanzó la notoriedad que tuvo durante tantos años. Pero al mismo tiempo, el CD nos revela la cara más inédita del inglés: la de un melodista con tremenda facilidad y buen gusto para las partituras intimistas, estilo menos notorio pero que probablemente influyó en compatriotas coetáneos como John Scott o Michael J. Lewis. De esta forma, pese a que será siempre recordado por sus colaboraciones para el cine bélico, el disco realiza un agradecido repaso por sus partituras menos conocidas para la comedia o el drama, incluyendo verdaderas joyas que hasta ahora permanecían inéditas.

Aquella cara más melódica y alejada del belicismo, es la que sirve de arranque al CD con la solemnidad del “London Theme” de “Frenesí” -película de Hitchcock en la que Goodwin tuvo el honor de reemplazar al maestro Mancini-, para continuar con el romanticismo desprendido por la preciosa melodía central de “Lancelot and Guinevere”, claro ejemplo de esa épica contenida con la que nos obsequiaba en ocasiones el músico.

No menos bello resulta el solo de violín que oiremos en el tema de amor para “Beauty and The Beast”, corte bucólico que contrasta con la viveza y simpatía desprendida por el “Miss Marple Theme”, interpretado aquí con la misma elegancia con la que lo hizo la Sinfónica de Odense, en el único álbum que hasta la fecha recogía esta sintonía.

“Whirpool” supone el génesis de la carrera cinematográfica de Goodwin allá por el año 1958. Un agradable tema nunca antes publicado, impregnado del estilo easy-listening de la época, y que denota una loable madurez artística para ser su debut en el cine. También inédita es la suite de “Clash of Loyalties”, rareza de 1983 de un filme con producción iraquí cuya inclusión merece la pena destacar. La suite arranca y finaliza con el vigoroso tema principal, una marcha con sabor al cine de aventuras de los 50 por su característica orquestación, intercalado por un efectivo motivo de tintes románticos y raíces árabes, si bien un tanto tributario de laaproximación de Jarre para la mítica “Lawrence of Arabia”.

Para el que esto escribe, la pista más destacada del CD es aquella que conforma el leitmotiv central de “Of Human Bondage” (no confundir con la partitura del mismo título de Korngold). Delicada, dulce, emotiva..., faltan los adjetivos para definir esta espléndida pieza romántica, mezcla de lo mejor del estilo Barry con la impronta lírica de Goodwin. Es una lástima que el score sólo se pueda encontrar (con muchísima suerte) en formato de vinilo, en un trabajo más del inglés que pide a gritos su edición oficial en compacto.

La historia del main theme de “The Trap” resulta curiosa: es otro más de esos ejemplos en los que una banda sonora consigue rescatar del olvido al filme para el que se compuso, una por otro lado, estimable película protagonizada por Oliver Reed. Fue cuando la BBC eligió su música como sintonía para las retransmisiones del Maratón de Londres, alcanzando tanta popularidad que desde entonces esta solemne obertura es conocida como “The London Marathon Theme”.

En cuanto a sus scores bélicos, quizás por el hecho de ser los más conocido de su carrera y de haber sido versionados hasta la saciedad en multitud de compilaciones, resultan seguramente la parte menos sugestiva del CD. Aparte del mítico motivo central de “Escuadrón 633”, se incluye una suite de seis temas de “La Batalla de Inglaterra”, algo deslucida por una interpretación carente del vigor y luminosidad de la versión original (sobre todo en el “Battle of Britain Theme”, ejecutado a un tempo más lento). Cosa que no sucede con los cortes 16, 21 y 22 pertenecientes a las partituras de ”Operación Crossbow”, “Fuerza 10 de Navarone” y “El Desafío de las Águilas”, tres de los main titles más trepidantes y aclamados del Goodwin bélico, en los que la orquesta ralla a un nivel sensacional (tremendos los metales), conformando tres regrabaciones prácticamente calcadas a sus originales.

Como magnífico cierre del album, se incluye una selección del score compuesto para “Aquellos Chalados en sus Locos Cacharros”, en el que la versatilidad de Goodwin se hace patente con un material alocado,. de entrega absoluta a la comedia y ciertamente alejada de aquellos trabajos más clásicos oídos anteriormente.

Aún echándose de menos alguna estimable obra del británico (como bien pudiera ser su última “Valhalla”), por su diversidad temática y por la inclusión de varios temas inéditos, el álbum constituye una auténtica gozada tanto para los que se inicien en la carrera de Goodwin, como también para aquellos fans del compositor que busquen nuevo material sin edición oficial.