Ignacio Garrido
La filmografía de David Amram no es nutrida en éxitos y su discografía disponible es menos abundante todavía como para resultar un autor remarcable de cara al reconocimiento del aficionado. No obstante para todo hay excepciones en el campo de las artes, y en la música de cine se puede ser un perfecto desconocido y al mismo tiempo alinearse los astros para entregar una obra excepcional llamada a ser meritoria del beneplácito de todo amante de la música. "The Young Savages" es esta obra en el caso de Amram.
La cinta dirigida por un artesano de la talla de John Frankenheimer, presenta el drama social de unos muchachos descarriados y los intentos de Burt Lancanster por comprenderlos y reconducirlos a su integración en la sociedad. La feliz recuperación por parte de Intrada de este trabajo tan solo disponible en LP hasta ahora, nos permite descubrir los mimbres de un nombre equiparable (en más de un sentido) al de Alex North, tanto en su vertiente jazzística como sinfónica. La programación del disco nos provee de las dos secciones bien diferenciadas de dicho álbum original, siendo el jazz y los cortes diegéticos los que hacen su aparición primero y la música orquestal después.
El disco se abre con su melancólico tema central para armónica, plasmando en su breve intervención inicial en "Harold´s Way" todo el peso de la soledad y tragedia que evoca la historia principal. Esta melodía conocerá diversas e interesantes variaciones en la sección incidental, aunque su afirmación más comercial será en precisamente "Theme from The Young Savages", para guitarra, armónica y reducido combo percusivo de tintes étnicos que evoca el origen portoriqueño de los jóvenes protagonistas. Las otras tres pistas entre las antes citadas, "Las Muchachas Delicadas" (más liviana y de "guateque"), "True Blue" (nocturna y evocadora) y "Harold´s Way Out" (con ecos a la trompeta y rítmica de Miles Davis), representan las composiciones jazzísticas más o menos animadas de la primera parte.
Llegamos a la parte magra de la composición con "Switchblades on Parade", un pasaje agitado y nervioso de acción que recuerda en gran medida a los "Main Titles" de "Spartacus", en su orquestación e intenciones dramáticas, que desarrolla al borde de la atonalidad una progresión polirrítmica arrolladora y que tendrá su acechante continuación en "Help!". "The Last Taco" es una tensa pista de creciente violencia sonora, donde las cuerdas ejecutan una intervención fantasmagórica que se complementa con una percusión asincrónica que evoca un bestialismo primitivo y salvaje. Por contraste, la hermosa versión orquestal de "Theme from The Young Savages" resulta cálida y delicada, con un trabajo de cuerdas exquisito y el desarrollo temático más pleno de la melodía central. "Funeral March and Requiem" suponen otra prueba de la polivalencia de Amram, articulando una patética marcheta de tintes latinos, para acto seguido presentar una pieza litúrgica y ominosa para órgano de iglesia. La mixtura genérica más sorprendente acontece en "Subway Sounds", donde una emotiva rendición del tema central enseguida da paso a un frenético fragmento de acción con percusiones étnicas y metales chirriantes, mientras la melodía central se diluye en la trompeta y la cuerda. "Later in the Elevator" supone la ampliación de estas ideas con una pizca de Rosenman en el discurso polifónico atonal de los metales, antes de cerrarse todo con una coda lírica y resolutiva.
El esperanzador final de "Rooftops" evoca el sentimiento americano (incluso newyorkino) de Leonard Bernstein y su mítica "On the Waterfront" (la referencia no es baladí, pues el mismo Amram compuso la adaptación para Broadway de la obra que se editó en disco en 1995), en su uso de las cuerdas, pero soslayando toda referencia virtual en favor de una claridad expositiva propia para con la tragedia vivida, recopilando así el tema central con un nuevo prisma más integrador en el lenguaje americano. Quizás intencionadamente, el primitivismo de las étnias queda musicalmente apaciguado por el conciliador espíritu de América, con un comentario sutil pero destacable que da muestras del sibilino arte de componer música de cine con intención y concepto tanto emocional como coyuntural.
El talento de David Amram ha quedado diseminado y diluido a un puñado de títulos rescatables como "The Manchurian Candidate", "Splendor in the Grass" o "The Arrangement" (estas dos últimas películas firmadas por Elia Kazan realizador de "On the Waterfront", lo que da más pistas de las previas coincidencias nada casuales), con apenas un puñado de discos en los que apreciar su arte, pero desde estas líneas y con "The Young Savages" como ejemplo, se puede afirmar sin miedo que merece la pena descubrirle.
24-octubre-2014
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