La música de Rolfe Kent, es todo un soplo de aire fresco en el actual panorama de la música cinematográfica. Kent es un músico inquieto, obsesionado con la experimentación y la busqueda de nuevos caminos musicales, que ama realmente esta profesión. Sus colaboraciones con el director Alexander Payne, dan siempre como fruto estimulantes composiciones musicales de la talla de “A Propósito de Schmidt” y sobretodo, "Entre Copas". Un trabajo este último, por el que Kent ha obtenido el reconocimiento unánime de público y crítica, llegando incluso a ser nominado a los Globos de Oro. Rolfe acaba de ingresar en el selecto grupo de los futuros pesos pesados de la música de cine. De nuevo las islas británicas exportando valores a la meca del cine. Desde Scoremagacine, esperamos que disfrutéis con esta entrevista...
Antes de comenzar con las preguntas, nos gustaría agradecerte tú participación. Para nosotros es un privilegio la oportunidad de tener esta entrevista contigo.
En primer lugar, nos gustaría que nos hablases un poco de ti. Naciste en Escocia ....
En realidad nací en un ferry escocés que hacía el trayecto entre Dieppe y Dover, en medio de un apagón. Así que el parto se llevó a cabo, iluminado con la luz de las velas y con el barco a la deriva alrededor de una hora.
Me empecé a interesar por la música de cine, cuando tenía 12 años. Me encantaba tocar y crear música, y amaba las películas, y sobretodo los temas musicales de las mismas. Así que comencé a pensar en lo bien que estaría hacer música que estuviera asociada a romances o aventuras, y lo mucho que me gustaba eso.
A pesar de estar involucrado en la creación musical de muchas comedias, tu perspectiva casi siempre es emocional y psicológica. En esa aproximación, ¿ha influido mucho el hecho de haber estudiado psicología?, ¿te planteas la música cinematográfica como una disciplina que pretende trasmitir las emociones que por si solas las imágenes no son capaces de expresar?.
No creo que mi formación como psicólogo haya tenido influencia en mi música, pero lo que sí creo es que la música puede contribuir a potenciar las emociones que no son captadas por la película. Mi aproximación musical en cada proyecto es siempre muy intuitiva. Yo no tengo ninguna teoría en relación a como o porque la música funciona. Simplemente llego a ello. Cuando la música viene del alma, puede ser muy poderosa.
Tú música se caracteriza principalmente por la presencia de retentivas melodías y originales orquestaciones. ¿Es difícil encontrar la inspiración para componer los temas de tus películas?
Es siempre la parte más difícil, y a veces te puede costar un par de semanas hasta que aparece la idea adecuada. Esto ocurre, porque hay que sentirse parte integrante de la película. Así, yo tengo que sentir el alma y el verdadero núcleo emocional del film dentro de mí, antes de que pueda realmente escribir la música.
¿Cómo es tú relación con el orquestador Tony Blondal?
Tony realiza los arreglos finales de mi trabajo de forma muy detallada, y transforma mi creación en partes orquestales completas. A mí me gusta ser muy específico en cuanto a la tonalidad y al color de la música, y Tony protege todo esto mientras realiza la fusión total de la música.
Después del éxito de tú música para la obra teatral "Gross", entraste a trabajar en la producción para la televisión británica "Shalom Joan Collins". ¿Qué puedes contarnos de esa experiencia?
El escritor y director de "Gross", Peter Morgan, se puso en contacto conmigo un par de años después, justo cuando estaba involucrado en "Shalom Joan Collins", presentándome a Mandie Fletcher, el director. Este fue el primer trabajo dramático de índole profesional que hice para la televisión. En él estuve involucrado junto a otros tres músicos más, lo cual no impide que fuera un bonito comienzo para mí.
Te trasladas a Estados Unidos a primeros de los noventa y tras conocer a Alexander Payne, del que hablaremos mas tarde, trabajas con Mark Waters en “The house of yes”, a la que seguirán “Ponte en mi Lugar (Freaky Friday) y “Chicas Malas” (Mean girls). ¿Cómo ha sido trabajar para él?.
Conocí a Mark tiempo después de haber trabajado con Alexander Payne en dos cortometrajes y en su primera película, “Una Chica Sorprendente” (Citizen Ruth). Mark Waters es un director muy decidido, muy abierto a las ideas creativas y que toma sus decisiones de forma muy rápida. Él es sorprendentemente eficaz, y tiene una personalidad arrolladora y carismática. Para “Chicas Malas” (Mean Girls), yo quería hacer un score coral con voces africanas, fue algo maravilloso que le encantó también a Mark. Con “Ponte en Mi Lugar” (Freaky Friday), sugerí una orquesta de cuerdas y taiko drums, y él fue otra vez muy sensible y valiente con mis ideas.
Me encanta trabajar con Mark.
Uno de tus primeros éxitos de crítica fue “Una Extraña Petición “ (The theory of flight). En el prima el uso de la cuerda y su romanticismo nostálgico. ¿Escribiste la partitura bajo la influencia del estilo de John Barry no es verdad? Y por cierto, nos llama poderosamente la atención que en los agradecimientos del disco muestras tú admiración por Helena Bonham Carter. ¿Qué relación estableciste con ella y hasta que punto fue fuente de inspiración en la creación de esta obra?.
A mí me encanta el estilo musical de John Barry. Un estilo de profundas emociones y cuerdas conmovedoras. Desearía hacer más trabajos en esa línea. Con Helena Bonham Carter tengo una buena amistad. Ella estaba en Los Ángeles filmado "El Club de la Lucha", mientras yo estaba componiendo el score de “Una Extraña Petición” (The Theory of Flight), así que ella y yo intercambiamos opiniones sobre la música muchas veces, ayudándome mucho en el proceso de creación de esta partitura.
Para "Blanco Perfecto” (Gunshy), escribiste un score muy divertido y ecléctico, mezclando música colombiana, italiana, americana e irlandesa, lo cual no impidió que también incidieras en el aspecto psicológico de los protagonistas. ¿Por qué elegiste esta aproximación?
Por pura intuición. A mí me gustaba la idea de trabajar con todos esos estilos al mismo tiempo. Buscaba un sonido especial, y me gusto mucho como fue la grabación grabación, y la forma en la que se enfrentaban esos estilos tan dispares con el sonido orquestal propiamente dicho.
En “Persiguiendo a Betty” (Nurse Betty) trabajaste con Neil Labute . Es este un score muy querido por los aficionados, y que tiene un estructura realmente compleja. ¿Qué aspectos del film fueron más atractivos para ti?
Estás en lo cierto. Hay tres partes en este score. Primero, escribí una música muy oscura, usando técnicas propias del thriller y el suspense, conectada al mundo real; en la segunda parte, donde trato de enfatizar el lado romántico de la historia, conecta con el mundo imaginario de Betty, y la tercera parte, que es la que pertenece al culebrón "A Reason to Love", que tiene su propio tema, que gradualmente se integra en el tema de amor. Disfruté mucho trabajando de esta manera, cogiendo una mala sintonía de televisión y desarrollándola hasta convertirla en un sentido y emocional tema de amor. El tema de Betty, esa loca e ilusoria melodía, es una de mis favoritas.
Has trabajado también en otras películas románticas como "Kate & Leopold" y “Siempre a Tú Lado" (Someone Like You). Para "Kate &Leopold", no sólo escribiste un precioso tema de amor, sino además un poderoso y rítmico tema de acción. ¿Cómo te viste involucrado en ambos proyectos y que piensas acerca de ellos?
El productor de "Una Chica Sorprendente” (Citizen Ruth), me llamó para que le echara un vistazo a "Kate & Leopold", y la película me encantó. Sobretodo por ese aire que emana a romance clásico. Hice el score en cuatro semanas. Fue un proyecto extenuante y muy intenso, para el que el director Jim Mangold me hizo trabajar de forma muy dura, pero aún así me encanta la película.
"Siempre a tú lado" (Someone Like You), fue todo un placer hacerlo, entre otras razones porque volví a coincidir con Hugh Jackman, y porque el director Tony Goldwyn, es realmente agradable e imaginativo. Fue divertido.
"The Jury" supuso tú retorno a Gran Bretaña. Esta es una obra muy dramática, donde usas el duduk, y la voz de Allison Jiear. ¿Cómo fue la experiencia?
Fue genial. Y la voz de Allison, suave y llena de emoción, hizo que todo el score brillara realmente.
Hablemos ahora de tú relación con Alexander Payne. ¿Cómo le conociste? ¿Qué recuerdas de tus experiencias junto a él en "Una Chica Sorprendente” (Citizen Ruth), un film que trata un tema tan delicado como el aborto?
Como te dije antes, conocí a Alexander Payne trabajando con él previamente en dos cortometrajes. Ambos compartimos un gran sentido del humor, y desde entonce hemos sido muy buenos amigos. "Una Chica Sorprendente” (Citizen Ruth), era una comedía para la que yo estaba en disposición de aportar unas cuantas ideas bastante raras para la música. Por ejemplo, que Alexander Payne y yo mismo silbáramos la melodía del tema "Baby-Savers March". Con él,
¿Tienes plena libertad creativa o suele ser muy especifico en sus peticiones musicales?
Alexander siempre me indica a mí parte de la dirección que debe tomar la música, pero luego me abre la posibilidad de experimentar como yo quiera. Posteriormente, él y yo examinamos cuidadosamente estos "experimentos", y vemos que nos gusta y como podríamos desarrollarlos en beneficio del film.
Con “Election” Alexander entra en el tema del sueño americano con, para mi, con mucho mas acierto que Mendes en “American beauty”, entregando al espectador un caramelo envenenado. Creo sin lugar a dudas que este es uno de tus trabajos mas eclécticos y donde ese acercamiento a la música italiana de los 60 y 70 se hace mas evidente, en especial a Morricone. ¿Porqué una música tan desenfadada y evasiva en una historia a la postre tan dura como esta?, ¿Qué pretendíais subrayar con ello?.
Es una comedia, y yo quería contraponer la música con las imágenes. Realmente disfruté trabajando en este film, y la referencia a "El Bueno, el Feo y el Malo" ¡Fue muy divertida!
"A Propósito de Schmidt" (About Schmidt) es una lúcida visión de la vejez. Aquí acudes a instrumentación exótica, incluso japonesa, y creas un rico score melódico que parece ir contra la explícita soledad egoísta del personaje. ¿Cuál fue tú aproximación a este trabajo?
Intenté mostrar al público la naturaleza positiva de Schmidt, quería mostrar que era humano, y que nosotros podíamos sentir compasión hacía él, si realmente supiéramos lo que él piensa. Esta naturaleza positiva sólo aparecerá al final del largo viaje.
"Entre Copas" (Sideways) ha sido un enorme éxito, tanto con respecto a la película, como en lo que concierne al score. ¿Qué puedes contarnos de este trabajo? Aquí, también has trabajado con solistas como Dan Higgins, Alex Acuna, Ron Feuer y Dan Savant, ¿cómo fue la experiencia?
Alexander Payne pensó que el jazz iría bien con el vino. Él es un enamorado del espíritu musical de compositores italianos como Piero Umiliani ("I soliti ignoti" especialmente). Así que yo escribí un score de jazz. Sobre la segunda pregunta, tengo que decir que es muy diferente a la grabación orquestal. Tú grabas muchas veces para ver lo que cada grabación puede ofrecer. El solista te ofrece un sonido original y diferente, dependiendo de la interpretación que ellos le den a la música.
Por este trabajo, has ganado varios premios, y has sido nominado a los Globos de Oro. ¿Cuales son tus impresiones sobre estos reconocimiento? ¿Piensas que tú vida y carrera han cambiado en algo?
No creo que nada vaya a cambiar, porque yo sigo haciendo lo que realmente me gusta.
Tu relación con el director Richard Shepard te ha permitido explorar varios géneros. ¿Cómo ha sido trabajar en films con música tan dispar como “Oxygen”, un thriller, o “Distrito Federal” (Mexico City) donde sólo empleas guitarra?.
Richard es un buen amigo y a través de él yo he podido explorar el campo del thriller. Para mí es vital poder experimentar en todos los campos de la música, y eso es algo que le agradezco a Richard, quien a su vez, realmente disfruta con mi forma de trabajar.
En alguna ocasión has comentado que no te gusta trabajar con temp tracks. ¿Has tenido serios problemas por este hecho en alguna obra?, ¿te has sentido condicionado alguna vez?.
A veces, pero normalmente yo no suelo escucharlos. ¿Por qué escuchar un montón de música antes de tener mis propias ideas creativas? Esto no son matemáticas, es creatividad, y la música de cine debería ser original.
Has trabajado en películas cuyos scores nunca han sido editados en cd. Sin embargo, algunos de ellos si tienen álbumes editados con sólo canciones ¿Qué piensas de este asunto?
Bien, poca gente compra la música de cine en cd, así que es difícil para las compañías sacar un beneficio de ello. Yo espero que mi música sea cada vez más interesante, porque así la gente querrá comprarla.
Para terminar, nos encantaría saber de cual de tus scores te sientes más orgullo, y por supuesto, en que proyectos estás trabajando actualmente.
Estoy muy satisfecho con la mayoría de ellos, pero por diferentes razones en cada caso. Que "Entre Copas" esté recibiendo tanta atención, es algo que me hace muy feliz. Pienso que es un trabajo que realmente funciona como música fuera del film. Sobre mis nuevos proyectos, te puedo decir que acabo de terminar "The Matador", donde he vuelto a trabajar con Richard Sheppard otra vez. El score es una mezcla de numerosos instrumentos e influencias, donde utilizo el duduk, percusiones orientales y orquestación tradicional. Además, he trabajado en la comedia "Wedding Crashers", dirigida por David Dobkin. Y actualmente estoy trabajando con Alexander Payne en su nuevo proyecto. Una película muy interesante llamada "Nebraska".
Muchas gracias por el tiempo que nos ha dispensado con esta entrevista. Ha sido un honor y un privilegio para nosotros. Le deseamos el futuro más brillante, y que disfrute con sus nuevos trabajos.
23-abril-2005
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